No es más cierto que el Hennessey Venom GT es apenas un Lotus Exige alargado, muy alargado. Para el que no lo supiera desde luego le parecerá un superdeportivo impresionante, que lo es, pero desde luego no habría que hacerle mucho caso porque implicaría que tampoco conocería la increíble máquina de Lotus.
El punto de partida del Venom GT le resta valor al proyecto, ya que siempre se busca el estilo propio en un superdeportivo y Hennessey lo ha robado del Exige. En realidad están licenciados, por lo cual no hay problemas legales, y Hennessey sabe darle el toque personal necesario.
El Venom GT cuenta con un increíble motor V8 LS9 de 6,2 litros, que le entrega la nada despreciable potencia de 1.200 CV. La comparación con el Veyron no se hace esperar, pues el Venom GT con la mitad de cilindros consigue la misma potencia. Chúpate esa soberbio franco-alemán.
El Veyron necesita 8 kilómetros en línea recta para alcanzar su velocidad máxima, los 411 km/h, sin embargo el Hennessey Venom GT alcanza los 370 km/h desde parado en 19,96 segundos. Menuda brabuconada.
A falta de confirmarse las enormes cifras de este Exige hipervitaminado, os dejamos con el vídeo:
httpv://youtu.be/turV3v9RYeU
