Creo que todos conocemos la cantidad de problemas que podemos tener a la hora de interconectar nuestro teléfono móvil, mp3, pda, smartphone, etc. con nuestro automóvil. Y muy a nuestro pesar a veces, se ha convertido en una herramienta muy necesaria en nuestras vidas, puesto que esta sociedad de la información en la que vivimos nos hace estar conectados 24 horas todos entre todos, y un e-mail leído a destiempo puede hacernos perder un trabajo.
Los fabricantes de automóviles son de eso, de automóviles, y se hechan las manos a la cabeza con la cantidad de gadgets distintos que podemos llegar a tener. Aunque para ellos es muy fácil cobrarte un dineral por una conexión especial para tu terminal en concreto, no todo se queda en eso puesto que por ejemplo a la hora de aceptar una llamada seguramente tengas que descolgar en el teléfono, a no ser que te hayas gastado una pasta en un sistema especial para tu coche.
Los clientes no somos del todo imbéciles, puesto que sabemos que una conexión USB a nuestra “radio” del coche no cuesta 50 €, o más a veces. Para ello ha nacido el Car Connectivity Consortium (en adelante CCC), que pretende la difícil tarea de crear un estándar para todos los tipos distintos de dispositivos externos al vehículo que podemos tener, para conectarlos a todos los diferentes sistemas multimedia que montan los coches.
En realidad el CCC no es más que una evolución de la alianza Consumer Electronics for Automotive, pero aunque ésta última sólo obtuviera apoyo de los fabricantes alemanes, el CCC cuenta con más apoyo a nivel mundial de la talla de Honda, Toyota, General Motors, Hyundai, Alpine, Panasonic, LG, Samsung, Daimler, Volkswagen y Nokia. Ésta última es la que lleva las riendas del asunto, puesto que llevan trabajando bastante tiempo en lo que llaman Terminal Mode, del que Daimler y Volkswagen también colaboran.
Este Terminal Mode sería el arma casi definitiva, puesto que ofrecería conectividad NFC (sin cables para el usuario) y además integraría la pantalla de nuestro teléfono en la pantalla de nuestro vehículo, lo cuál nos haría ver los menús más grandes y tenerlos más a mano, puesto que serían controlados con los mandos de nuestro propio vehículo.
La gran perdedora en este sentido ha sido Ford y su sistema SYNC. No es que lo hayan perdido ya todo, pero es un fuerte revés cuando se pensaban que iban a ser los únicos en ofrecer un sistema de este calibre.
Vaya, para una vez que Ford tiene algo interesante, va y llega esta noticia, para echarse a llorar… jajaja
sí tío XD parece que lo hacen aposta, pero ya les vale no haber hecho algo parecido antes… jejej
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