La publicidad puede tener muchas caras, pero siempre persigue un mismo objetivo, vender. Si comparamos un producto de la competencia con el nuestro, y el nuestro es superior, evidentemente daremos una imagen mucho mejor, aunque no fuese justo. Sin embargo este factor le es indiferente a muchas marcas, y no dejan escapar la ocasión de comparar su producto con otro para demostrar su “poder”, aunque dicha comparación resulte injusta o absurda.
Podemos encontrar casos diferentes, como el de una misma marca que compara dos de sus modelos, como el ejemplo que os traje el otro día de Ferrari. Pero el fin es el mismo, demostrar el poder de una marca. Y eso es lo que ha querido hacer Cadillac, comparando su monstruoso Suv con un Mercedes-Benz C300 en una prueba de aceleración. No, no habéis leído mal, un Cadillac Escalade contra un Mercedes-Benz C300.
¿Os resulta absurdo?, evidentemente lo es, pues el Cadillac Escalade monta un motor V8 de 403 cv de potencia, que a pesar de contar con el factor peso, no le es difícil “llevarse de calle” al pobre C300. Y no es de extrañar, puesto que Cadillac ha sabido bien con quién meterse, pues podríamos decir que ha elegido el modelo más pequeño de la gama Mercedes-Benz por encima de C250, en Estados Unidos, puesto que allí no se vende el Clase A, que si no seguro que este vídeo resultaría ser aún más absurdo. Lo más coherente hubiese sido que Cadillac hubiese enfrentado su Suv con el Mercedes-Benz M, o con su hermano mayor el GL.
Pero parece que lo que pretendía es dejar en ridículo, y no hacer el ridículo. Pues seguro que Cadillac no se hubiese atrevido ha hacer esta prueba de aceleración con ninguno de los Suvs de la casa germana.Y estoy aún más seguro de que ni se habrán planteado haberla hecho con un Mercedes-Benz C63 AMG, que es la versión más potente del C. Seguramente si lo hubiesen hecho el resultado hubiese acabado siendo totalmente opuesto, y quizás un poco más absurdo. Aquí tenéis el vídeo: