El Honda CR-Z es un modelo bonito, si te gustan los patos, biplaza, deportivo y encima híbrido. Cumple con todos los requisitos de los jóvenes con estilo que se preocupan por el medio ambiente. Pero fallaba una pequeña cosa para llamarlo deportivo, y era algo más de potencia. Se comporta de lujo, pero le falta chispa.
Honda pretende solucionar este pequño fallo en el CR-Z aumentando la potencia en 20 CV más en el motor de combustión, dejando la cifra dela potencia extraída del petróleo en los 121 CV. A esto, como supongo que sabreís, se le suma la potencia de su motor eléctrico llegando hasta los 137 CV, algo más decente para un deportivo.
Que sea decente no quiere decir que sea suficiente, porque sólo consigue bajar el 0-100 kmh hasta los 9 años, antes lo hacía en 9,7 (nótese la ironía). Y es que si pretendes llamarlo deportivo, bajame hasta los 6 o 7 segundos.
En cualquier caso hay que tener en cuenta un modo nuevo que ha preparado Honda denominado “S+”. En este modo, si el coche tiene más del 50% de carga eléctrica, dispondremos del motor eléctrico a máxima potencia en un pisotón del acelerador.
Para completar la estética chic del modelo, Honda renueva la gama de colores para el CR-Z junto con nuevos diseños de llantas.
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