Por suerte todo quedará en casa y SAAB no pasará a manos chinas, sino que ha sido adquirida completamente por la empresa NEVS (National Electric Vehicle Sweden). Aunque para ser correctos si que tiene algo de asiático porque su presidente es Kai Johan Jiang, natural de Suecia chino de pura cepa, nacionalizado en Suecia y la empresa recibe capital chino y japonés.
NEVS ha tenido que negociar todo este tiempo con tres SAAB, y es que los suecos tenían subdividida la marca en distintas empresas lo cual ha complicado bastante el acuerdo final. Al final, tras un acuerdo con Saab AB (la división de aviones), NEVS podrá utilizar el nombre de SAAB como denominación comercial para sus modelos.
El lío con el logotipo del grifo tiene mérito, porque Scania dispone de los derecho para utilizar el logotipo con los colores azul y rojo, lo cual dejaba un pequeño camino para los diseñadores e intentar seguir utilizando el “grifo” pero con distintos colores. En NEVS no se han complicado y han decidido no jugar esa carta y simplemente utilizarán el nombre de la marca como logotipo, al igual que hace ahora por ejemplo Dodge.
El consorcio sueco con sede en Hong Kong y que utilizará tecnología japonesa (todavía me se lengua la traba al decirlo) retomará la producción del Saab 9-3 e-Power, modificándolo ligeramente lo necesario para adaptarlo al nuevo diseño que quiera seguir NEVS. En principio se produciría en Suecia para exportarlo al mercado chino, aunque no sería de extrañar ni se descarta que estos modelos se comercialicen en Europa.