Qué lástima que un piloto como Robert Kubica no pueda volver a pilotar un Fórmula 1. Luego pienso en los desahucios y se me pasa la tontería, pero igualmente es una mala noticia, más de las que recibimos a diario, pero esta vez para el deporte del motor.
El piloto polaco ha confirmado a la cadena británica BBC que las secuelas que arrastra en su brazo derecho, tras el accidente en el Skoda Fabia S2000, le impiden tener la movilidad suficiente para competir en un Fórmula 1.
Actualmente se encuentra disputando el Rally di Como, al volante de un Citroën C4 WRC. Confirma a su vez que seguirá compitiendo en pruebas de Rally y que intentará estar presente en la máxima categoría de otras especialidades, pero descarta completamente su vuelta a lo que ya dudamos si es la máxima competición del automovilismo o sólo un circo.
Lamentablemente se trunca la carrera deportiva de uno de los pilotos que podía haber hecho historia en la F1, no quiero ni imaginarme la dupla en Lotus si Raikkonen hubiese sustituido a Grosjean, o simplemente si Kubica hubiese vuelto a conducir un coche tan competitivo como es el ex-Renault.
Siempre nos quedará la posibilidad de verle en los rallyes, y seguramente tome un papel más importante en Citroën después de participar con el C4 WRC en el Rally di Como.
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