A veces el avance de la industria es abrumador. Siendo alguien tan ligado a la tecnología como yo no debería sorprenderme, puesto no se arranca la comercialización de un smartphone o tablet y ya se está hablando no del sucesor, sino de dos generaciones por delante.
Si hablamos de productos de apenas unos cientos de euros es hasta cierto punto comprensible, ya que no se invierte tanto dinero en su desarrollo, pero cuando hablamos de un vehículo que en sí mismo cuesta más de un millón de euros nos empiezan a temblar las piernas sólo de pensar en su sucesor. Más aún cuando ni si quiera está a la venta el P1 y ya se habla de su sucesor.
En Autocar han tenido acceso a documentación interna de McLaren donde se revela que el objetivo de la fábrica de Woking es que el P1 sea el mejor coche de su segmento hasta que llegue su sucesor.
Que McLaren ya piense en un sucesor dentro de unos hipotéticos 10 años es un hito, puesto que está dentro de unos planes. La mayoría de los vehículos se enfrentan a ciclos de vida de unos 7 u 8 años, pero que un superdeportivo como el P1 tenga un ciclo de 10 años, no es que sea largo, ni razonable, es que es extremadamente corto.
Los superdeportivos de la talla del P1 no obedecen a ninguna cadena de producción, y ni si quiera entran en los planes de las marcas. Simplemente nacen después del sueño húmedo de alguno de sus ingenieros y punto.
Quizás aún sigamos por aquí dentro de 10 años para contaros que nos parece el sucesor del P1, y recordándoos esta entrada.
