Hacía tiempo que no hablabamos de motos y ya que volvimos para contaros el triplete español en las distinas categorías del Mundial de Motociclismo, hoy venimos a contaros lo que a buen seguro puede parecer un chiste y de los malos.
Si tomaramos como ejemplo el puesto de chinos de la esquina de cada ciudad en España, nadie nos diría que son gente osada y menos aún que son toda una organización a la hora de copiar productos de marcas comerciales conocidas.
Empezaron con las gafas, luego con los bolsos y pasando por los smartphones y todo tipo de objeto conocido que fabrique cualquier marca registrada, los chinos pueden copiarlo incluso antes de que salga al mercado. No iban a ser menos los vehículos.
Lo vimos con los modelos chinos de marcas como BAIC y ahora hay hasta motocicletas. Y aquí es donde empieza la broma.
La policía italiana confiscó en pleno EICMA, el mayor Salón de Motocicletas celebrado en Milán, todos los modelos más o menos similares a la Vespa llevados por “fabricantes” de origen chino.
No es que la policía italiana tenga nada en contra de los chinos, es que lo que no se puede hacer es plagiar el diseño de un producto totalmente y llevártelo a exhibirlo en frente del fabricante del mismo, Piaggio en este caso. Sabemos que en China estos casos de “plagio” son muy comunes y las autoridades no tienen leyes que los prohíban, pero en Italia no se han andado con juegos cuando se ha tratado de una marca propia.