Si uno de los protagonistas de una gran serie o de una gran película tiene cuatro ruedas, seguro que inmediatamente, la fama de dicho protagonista sube como la espuma. Ver en pantalla a un automóvil en particular en una serie o película que nos marque distintivamente, nos puede empujar a querer tener uno, y a obligarnos a no estar tranquilos hasta que lo tengamos.
De esto podemos poner muchos ejemplos, como el de la cuarta generación del Toyota Supra, que tras salir en la primera parte de A todo Gas, la demanda de este modelo en el mercado de segunda mano se incrementó de una forma considerable. Otro ejemplo lo podemos tener en el Volkswagen Beetle, seguro que muchas personas deseaban tener uno después de ver la película de Herbie.
Igualmente, el Beetle se vendió bastante bien por sus características, de hecho es uno de los automóviles más vendidos de la historia. Por otra parte, la cuarta generación del Toyota Supra también es un modelo que llama muchísimo la atención, y que a día de hoy sigue siendo objeto de deseo para muchos y muchas, y no sólo porque haya sido uno de los protagonistas de la primera entrega de A todo Gas, sino principalmente, por sus aspiraciones deportivas y su diseño.
Ambos ejemplos se relacionan con las películas mencionadas, pero en la actualidad, es raro el caso de la persona que busca uno de estos modelos porque los ha visto en las películas, pues como decimos, si los buscan, es más bien por las características que reflejan. Sin embargo, hay ejemplos como estos en los que no se podría decir lo mismo, ejemplos como podría ser el DeLorean DMC-12.
El DMC-12 fue un modelo que se vendió poco en su corta vida comercial, no reflejaba en absoluto unas características negativas para su época, pero por lo que costaba, se podría optar por opciones más atractivas y destacables. No por ello dejaba de ser un modelo bastante especial, un fuera de serie, único en su especie. En aquellos años habían modelos similares, pero no eran como el DMC-12.
Poco menos de 10.000 unidades se vendieron de este modelo tan especial, que como hemos dicho, tuvo una vida comercial muy corta. Pero la cosas cambiarían para él con el estreno de la primera película de Regreso al futuro, y por tanto, también con la llegada de los dos siguientes entregas. Las películas gustaron tanto, que la demanda de DeLorean de segundamano aumentó de una forma colosal, revalorizandose el precio de estos, que ya por entonces sólo se podían adquirir de segunda mano.
La cuestión es que antes del lanzamiento de estas películas, el DeLorean a penas había tenido éxito, fue tachado de fracaso comercial, marchándose del mercado por la puerta de atrás. ¿Es por tanto que su fama se la debe a la famosa trilogía?, ¿creéis que sino hubiesen existido se hubiese revivido a la marca? A mi parecer, si no hubiese sido por Regreso al Futuro, el DeLorean hubiese sido uno de esos modelos que se quedan en el olvido, que sólo recordarían los aficionados al motor. ¿Qué opináis vosotros y vosotras al respecto?