La division deportiva de Nissan estaba faltando en este juego. Si ya de por sí el Nissan GT-R es monstruoso, más aún será ver en persona la visión de Nismo para el deportivo matagigantes nipón. Y es que por fin llega la versión más prestacional del GT-R.
El Nissan GT-R Nismo contará con varias mejoras entre las que más destaca su sobrepotenciación del motor, en la que Nismo exprime el V6 biturbo de 3,8 litros hasta los increíbles 600 CV. Puede parecer una cifra fácil para un superdeportivo en esta época, pero si os digo que de cada litro de cilindrada se sacan 158 CV la cosa cambia un poco.
Nismo ha refinado la parte frontal con una boca más ancha para refrigerarse mejor, más alisado, y con una trasera totalmente renovada en la que se incluye un nuevo sistema de escape y un alerón para pegar el GT-R al suelo. Las llantas, preciosas, son unas Volks de 20 pulgadas calzadas con unos neumáticos Dunlop Sport Maxx GT 600 DSST de 255 milímetros de sección y un 40% de perfil.
Godzilla ha adelagazado, perdiendo 65 kilos en el campo de entrenamiento de Nismo, dejando la báscula en 1.750 kg. Con una simple regla de tres sacamos una relación potencia/peso de 2,92 kilos por CV. De infarto. Como lo es su nuevo tiempo en Nürburgring, que según se comenta ha parado el crono en 7:08.69, toda una burrada para un modelo “de calle”.
Sólo nos queda esperar al Salón de Tokio para confirmar estas informaciones.
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