Hoy sacamos nuestro lado más perverso para echarnos unas risas con el sufrimiento ajeno de los copilotos al montarse en coches potentes, cuando éstos no tienen ni idea de lo que se les viene encima.
No porque sean chicas sufren más, pero sí que es cierto que sus chillidos son algo más cómicos. Aunque ver a todo un maromo de dos metros gritar como una nenaza tampoco tiene ni una pizca de desperdicio. Todo esto, dicho sea, desde el respeto a dichas personas.
Las incautas chiquillas se han prestado voluntarias para montarse en el Nissan GT-R que Induction Performance ha preparado hasta los 900 CV de potencia. Creo que para acostumbrar a las pobres inocentes había que haberlas montado primero en un GT-R normal, para así acostumbrarse a sus 2,6 segundos de 0 a 100 de serie.
No sabemos en cuanto habrá dejado el 0-100 km/h, pero este GT-R deja el cuarto de milla en apenas 9 segundos.
httpv://youtu.be/znY1vNvlREc