Tarde o temprano tenía que ocurrir que el nuevo 911 perdiera el techo, y ya lo ha hecho. Hoy os traemos el nuevo Porsche 911 Carrera Cabriolet y Carrera S Cabriolet.
No me tildéis de loco, que podéis, pero hasta ahora no me habían gustado los Porsche a excepción de los GT3 RS. Pero este nuevo 911 le da un toque moderno sin perder su carisma.
Han elegido un techo de lona, como es normal en los 911, que está creada especialmente para no modificar las líneas del modelo de techo cerrado. Además, el nuevo marco de magnesio para el techo retráctil consigue no aumentar demasiado el peso respecto al modelo Coupé para que no lastre mucho a la versión descapotable.
El Porsche 911 Carrera Cabriolet dispondrá de 350 CV extraídos del bóxer de 3.4 l y 6 cilindros típico de los de Stuttgart, motor calcado a su versión coupé, mientras que para el Porsche 911 Carrera S Cabriolet estarán disponibles 400 CV, que también saldrán del motor de su homólogo coupé, un 3.8 l bóxer de 6 cilindros. Estarán disponibles con cambio manual y también, al igual que las versiones cerradas, con el cambio automático PDK de doble embrague y siete relaciones. Gracias a los impuestos españoles, los manuales serán más baratos que los automáticos. Cosas raras.
Los precios, que siguen sin ser low-cost, serán de 114.000 euros para el Carrera Cabriolet con PDK, y para que veáis la diferencia con el cambio manual, éste último costará 112.800 €. Poco, pero si encima algo mejor te sale más barato pues se agradece. El más caro, y más potente, será el Carrera S Cabriolet con un precio de partida de 130.000 €, a los que habrá que añadirle todo lo que le quieras poner de extra al coche.
Las fotos son la leche, que gratificante tiene que ser tener un Porsche en pleno verano a capota abierta, y rodar por una carretera montañosa al lado del mar.