La marca nipona tiene una joya en su garaje, y es el Nissan GT-R. Magnífico deportivo donde los haya, es capaz de doblegar a todopoderosos como el Porsche 911 Turbo y el Chevrolet Corvette que cuestan más dinero que el japonés, o incluso el doble como es el caso del 911 Turbo.
Una nueva edición le pone la guinda al pastel. El Nissan GT-R Track Pack recibe modificaciones tanto visuales como mecánicas para hacer del GT-R la máquina definitiva de devorar asfalto. El único pero que se le puede poner al coche es que solo viene con el volante a la derecha. Mierda Recórcholis.
Este nuevo Track Pack es la rizadura del rizo para los ingenieros. Si en la creación del GT-R ya se les fue un poco la olla con detalles que rozan el delirio, ahora creo que lo que fuma esta gente no debe ser legal. Las llantas, encargadas al especialista japonés Rays que ya consigue las más ligeras para el GT-R “básico”, son un modelo aun más ligero especialmente creadas por Rays. Si las banquetas traseras que lleva el GT-R pueden llamarse asientos, han sido suprimidas en el Track Pack para aligerar peso. Además, los asientos delanteros aumentan el apoyo lateral para que las fuerzas G no te escupan del coche.
En el apartado mecánico recibe una nueva suspensión, con unos muelles de recorrido más corto y a la vez más duro que se agarrarán al asfalto como gato panza arriba. Esto puede hacer echarse hacia atrás al más burgués, puesto que un tarado duro destroza hasta las caderas de titanio. Para que esto no ocurra el GT-R mantiene la suspensión ajustable electrónicamente, y así poder llegar al circuito vivo.
La potencia no ha aumentado, y se mantiene el 3.6 l V6 de 550 CV. Lo que nos lleva a que si no hay más potencia, tiene que haber mejores frenos para ser más rápido. Los frenos pasan a ser carbonocerámicos, y cuentan con una tobera de ventilación exclusiva para ellos en el frontal del coche.
El precio no será para nada desconsiderado para el único país de Europa, que no Europeo según ellos mismos, que podrá contar con esta versión circulando por sus calles. En el Reino Unido sólo costará 10.000 libras más de lo que cuesta un GT-R básico en ese país.
Vía Motorpasión, Autoblog