La división deportiva M de BMW no podía quedarse quieta viendo como usaban la fibra de carbono, material tan codiciado por los equipos de competición, para fines ecológicos. BMW i estaba desarrollando nuevas técnicas de construcción con CFRP, lo que viene siendo la fibra de carbono, y los M no podían quedarse atrás.
El modelo que se venderá, y único, será el modelo berlina del M3. La fibra de carbono se ha usado para cambiar varios paneles del coche, con lo que han conseguido rebajar el peso total del coche 70 kg, para dejarlo en 1580 kg en vacío. Este nuevo tejido de fibra de carbono se ha utilizado por ejemplo para la construcción del capó, reduciendo el peso a la cuarta parte de lo que pesa uno de acero, o a la mitad de lo que uno de aluminio. Alucinante, ¿verdad?. Más aún sabiendo que mantiene la misma fuerza y rigidez que uno de acero.
Comparte el mismo motor que el M3 GTS, un V8 de 4.4 litros que empuja con 450 CV. Esto, unido a la reducción de peso, le da una cifra de relación peso/potencia a tener en cuenta, 3,5 kg/CV. El M3 CRT también comparte la caja de cambios de siete velocidades y doble embrague, con funcionamiento secuencial a través de las levas en el volante más los ajustes del chasis.
Exteriormente, un splitter delantero y un alerón trasero en fibra de carbono se distinguen del Frozen Polar Silver de la carrocería, único color en el que se venderá. Las llantas discrepan con el color de la carrocería, al ser negras y de 19 pulgadas, con un ancho de 245 delante y 265 detrás. El interior combina la amada fibra de carbono con toques de tapicería en rojo Melbourne, toques o puñetazos según se mire.
Las cifras de prestaciones llegan hasta los 290 km/h de velocidad punta. En la aceleración hasta los 100 km/h consigue parar el crono a los 4,4 segundos. Si quieres uno tendrás que darte prisa y ser de los 67 primeros, puesto que será de edición limitada. También ve ahorrando rápido, los 130.000 € que costará en Alemania.
Fuente M-Power