Si hay un coche que me vuelva loco, y no es por seguir lo que dicen los demás que hayan hablado de esto, es el Mustang del ’66. Classic Recreations es la única empresa reconocida por Shelby para poder restaurar los Mustangs del 66 y venderlos como nuevos, o incluso como algo más.
Las réplicas serán construidas a partir de modelos originales Fastback de 1965, y por supuesto del original quedará el espíritu, porque será casi completamente nuevo. Empezando por frenos de alto rendimiento, y suspensiones de tipo coilover, los Mustang’s estarán completamente a la última en tecnología, por no hablar de los acabados.
Pero lo mejor lo guardan bajo el capó. El modelo más básico de las preparaciones simplemente montará un pequeño V8, con tan solo 7 litros de cubicaje, capaz de otorgar a las ruedas traseras 553 CV de potencia. Lo veo un poco justito de motor, ¿cómo lo veis vosotros?
Si necesitáis algo un poco más picante podéis optar por el “Stage 2”, que le incorpora un sutil compresor que le aumenta un centenar de caballos hasta los 654. Pero si aún sois unos ansias, que quieren quemar las ruedas en el primer semáforo en el que paren, hay un nivel de potencia más extremo. En este nivel, el motor 7.0 V8 recibe la ayuda de dos turbos que lo hacen ser de otro planeta directamente, teniendo en las ruedas traseras 1014 CV, apaga y vámonos.
¿El precio de esta joya volátil? Pues el base son 119.000 € para un coche que, al fin y al cabo, tiene 45 años, y por mucho que se renueve se acaba notando. Pero es un coche por el que no se mira el dinero, se mira más las sensaciones que proporciona. Un coche a la antigua usanza, con tecnología de última hornada y una potencia descomunal. Una auténtica joya volátil.