Hace unos meses os informábamos de que Mercedes-Benz volvía ha actualizar el aspecto del ya veterano Clase G para alargar aún más su vida comercial. Una vida comercial que se sostiene desde el año 1979, que fue cuando Mercedes-Benz comenzó su producción.Está claro que sustituir a un automóvil como el Clase G no es para nada una tarea sencilla, pero aunque sea posible, Mercedes-benz prefiere seguir actualizándolo para adaptarlo lo más posible a nuestros tiempos, y tenemos que admitir que al fin y al cabo, lo consigue hacer.
No obstante, y aunque pueda parecer mentira, Mercedes-Benz ha estado a punto de jubilarlo, pero hubo un factor principal que hizo que la marca de la estrella no solo prefiriese volver a actualizarlo, sino que además, decidiese añadir una variante AMG aún más potente que la que ofrecía. ¿Y cuál fue ese factor?, pues el aumento de la demanda que ha estado consiguiendo en los últimos tres años en Rusia y en China. Sí, así es, el Clase G se ha convertido en uno de los todocaminos favoritos de Rusia y China.
Tanto gusta el Clase G en estos dos países, que en estos últimos tres años, el número de ventas de este modelo ha crecido el 50% desde el inicio de su producción en el año 1979. Tan sólo el año pasado, Mercedes-Benz entregó un total de 6.600 unidades de este modelo en todo el mundo, acabando la mayor parte de ellas en los dos países que os acabamos de mencionar.
Por si fuese poco, se espera aumentar esa cifra con la última actualización que ha recibido, que ofrece un interior rediseñado y una nueva variante AMG, como ya os hemos comentado más arriba. Así que viendo esto, queda claro que al Clase G aún le queda mucha vida por delante. Y es que después de todo, si algo va bien, ¿por qué se va a cambiar?, al menos completamente.