Menudo baile se ha desatado esta mañana en la Fórmula 1, donde Mercedes tiene la voz cantante. Los de Stuttgart se desharán para 2013 de un campeón del mundo venido a menos, para fichar a otro que tampoco lleva buen paso pero al menos está en la flor de la vida. Pero vamos a ir por orden cronológico.
La primera noticia de todas ha sido la de que Sergio Pérez ficha por McLaren. La noticia la filtraba su propio padre en Twitter, y más tarde McLarne confirmaba el fichaje del mexicano. Se habló mucho de si podía recalar en Ferrari, pero al final han sido las flechas de plata las que se han hecho con los servicios del mexicano.
¿Y qué hueco ocuparía Pérez? Pues el dejado por Lewis Hamilton que abandona McLaren para pasarse al equipo de fábrica Mercedes GP. También los rumores acechaban el futuro del piloto inglés, sólo que esta vez llevaban algo más de acierto puesto que lo colocaban en el equipo de casa de Mercedes. ¿Créeis que ha hecho bien el inglés en cambiar de aires? Yo personalmente pienso que nunca está mal cambiar de aires, pero el inglés ya lo ha dado todo en McLaren y personalmente creo que sigue sin saber hacer el setup en condiciones del coche. Alonso, va por tí.
A todo esto, aquí nos va sobrando gente. Y el que sobra no es moco de pavo. Es el mismísimo Michael Schumacher, heptacampeón del mundo de Fórmula 1, que se retirará la próxima temporada. Y sabemos que es heptacampeón porque está escrito y hay datos oficiales y vídeos y fotos y merchandising y de todo. Voy a resumiros rápidamente su segundo paso por la F1: Patético.
Se veía venir que el alemán lo iba a tener muy complicado para volver a deslumbrar como lo hacía antaño, pero como buen alemán aceptó la apuesta. Y la perdió. Y encima recordamos lo c***** que puede ser compitiendo. Un tipo sin escrúpulos al que tomamos por héroe algunos, pero él solito se ha encargado de quitarnos la venda de los ojos.
Con esto no quiero decir que Schumacher no sea un gran piloto, porque sí lo es. Pero mejor dejémoslo aquí.
