El mercado de vehículos de ocasión en nuestro país es uno de los más estables dentro del sector automovilístico, además de ser uno de los más competitivos. Especialmente tras el reciente repunte de las ventas de coches nuevos para particulares.
El precio de vehículo que queramos vender en el mercado de ocasión va a depender fundamentalmente de dos factores: el vehículo en sí, y los años que tenga. Según Audatex (Compañía de servicios de valoración de siniestros, averías y mantenimientos al mercado de postventa de automoción), transcurrido el primer año desde que el consumidor adquirió el vehículo (nuevo), este pierde el 18% de su valor, el 29% en el segundo, y así sucesivamente, de modo que en su cuarto año este habría perdido prácticamente un 50% de su valor, y en su décimo año, la amortización de este es casi total.
De este modo si compramos un vehículo por valor de 30.000€, y transcurridos tres años queremos venderlo, el precio de venta oscilaría sobre los 18.000€ y 18.300€. Si en lugar de venderlo con tres años, decidimos venderlo transcurrido cinco años desde la compra, el precio de venta del vehículo de ocasión será de 15.0010€ aproximadamente. Si decidimos venderlo, pasados los diez años desde la compra, tendremos que considerar que la pérdida del valor del mismo será superior al 90%; es decir que el precio de este rondaría los 2.700€. Pero ojo, en esta ecuación falta un factor. La demanda.
La situación económica del país hace que los vehículos con más de diez años, también llamados “vehículos mileuristas”, sean los más demandados por aquellos que deciden comprar un coche de segunda mano. El difícil acceso al mercado de vehículos nuevos por parte de muchos hogares así como la necesidad y la no necesidad de financiación de los mismos, hacen que su precio se haya incrementado un 17%.
Por lo que si tras la compra de un vehículo hemos decidido venderlo pasados los 10 años, en lugar de vender el vehículo por los 2.700€, podremos incrementar su precio de venta el 17% correspondiente.