La gran mayoría de los modelos tienen estipulado un período de tiempo de vida comercial, que acaba con la llegada de un sustituto o la simple retirada del mercado. Ésta vida comercial se puede alargar todo lo que se quiera con diversos cambios, pero al fin y al cabo, el modelo no dejará de ser fruto del primero. No podemos decir que existan actualmente muchas marcas que se nieguen a jubilar a algunos de los modelos que lanzaron hace años, actualizándolos todo lo posible para que se adapten al resto de automóviles de la actualidad, pero haber las hay, y el ejemplo más cercano a nosotros es el de Mercedes-Benz con su clase G, que hace poco os informábamos de que volvía a sufrir cambios para seguir en el mercado.
Pero si nos vamos un poco más lejos, por ejemplo a China, encontraremos muchos más ejemplos de éste tipo que en la gama de vehículos que se comercializan en Europa o en Estados Unidos, como el singular caso del Volkswagen Santana. El Volkswagen Santana, que estaba basado en la plataforma del Passat B2, llegaba al mercado europeo a principios de los años ochenta, y finalizaba su producción en 1988. Sin embargo, el Santana seguiría vendiéndose y produciéndose en otros muchos países del mundo, jubilándose a principios y mediados de los noventa poco a poco.
Pero había uno de los países que lo había adoptado a finales de los ochenta, que ni mucho menos abandonaría su producción y comercialización a mediados de los noventa, sino que la amortizaría todo lo posible hasta más no poder. Ese país fue China, cuya empresa SAIC, una de las marcas de automóviles del país, había comprado los derechos de fabricación del Santana. Poco después de eso, Volkswagen se establecería en China aliándose con SAIC, y añadiendo de nuevo el Santana a su gama, que resultaría ser todo un éxito de ventas en dicho país.
Continuó su fabricación y su comercialización, realizando al modelo escasos cambios, que afectarían sobretodo a su modesta imagen. Así hasta la actualidad, dónde el Santana acumula poco más de treinta años de vida comercial. Una vida comercial que muchos son ya los rumores que afirman que se acaba éste mismo año, en el Volskwagen por fin se decide a jubilar al “legendario” Santana, ofreciendo en su lugar un sustituto más adaptado a nuestros tiempos. Como curiosidad, cabe destacar que desde 1983 a 2009, se han producido más de 3.000.000 de unidades del Santana, que garantizan sin duda alguna, la amortización del modelo por parte de Volkswagen.
ABDENAGO FINOL says
ES UN GRAN CARRO, FUERTE Y CON UNA ESPECTACULAR LINEA, TENGO UN VW SANTANA 2002, PERO EN VENEZUELA NO SE TOMAN PRECAUCIONES EL NO EXIGIR A LOS CONCESIONARIOS LA GARANTIA DE LOS REPUESTOS Y ACCESORIOS DE LOS VEHICULOS NO SE LE CONSIGUEN LAS MANILLAS DE LAS PUERTAS ENTRE OTROS COSAS , ES UN RAYON PARA LA VW DE VENEZUELA PORQUE NI ELLOS LAS TIENEN ESPERO QUE LEAN ESTE COMENTARIO PARA VER SI ME ENVIAN INFORMACION YA QUE NO QUIERO SALIR DEL VEHICULO.