¡Sacrilegio! ¿En qué estaban pensando estos alemanes? Un coche de tan limitada producción, y tan bien “hecho” en general no se merecía esto. No quiero decir que lo hayan estropeado estéticamente, puesto que para gustos los colores, pero desde mi humilde punto de vista no le hacía falta nada más a este coche.
Ya se atrevieron a retocar el nuevo BMW 650i que apenas ha salido de las fábricas, con un retoque monumental en el motor. Para este Serie 1 M Coupe, no solo se han centrado en el motor, sino que también han retocado su estética.
KS1-S han decidido llamarlo, y estéticamente se diferencia principalmente de su base en un nuevo splitter frontal y unas llantas gigantes de 20 pulgadas, que serán de todo menos efectivas a la hora divertirte en el circuito. Visualmente, la versión de las fotos tiene unas franjas blancas en la zona baja de los laterlas, y otras que salen desde el capó pasando por el techo hasta el maletero. También se pintan de blanco las carcasas de los retrovisores del Serie 1 M Coupe.
Vayámonos al motor, allí los alemanes demuestran su buen hacer. Las cifras son de infarto para este modelo, porque si ya con los 340 CV que traía de fábrica era un coche impresionante, cuando le pones 410 CV bajo el pie derecho al conductor tiene que duplicar la felicidad. El par motor también sube hasta los 550 NM, y todo esto gracias a un nuevo sistema de escape y unos retoques en la centralita de gestión del motor “ECU”.
La suspensión también ha sido retocada para digerir todo este potencial, con muelles y amortiguadores concéntricos ajustables. Además, en el interior la alcántara hace acto de presencia en los recubrimientos de la tapicería.
Vía Autoblog