En el Salón del Automóvil de París de 1984, la marca francesa Peugeot presentaba en su stand el Quasar, su primer concept car. Dotado de unas características que pretendían adelantar el futuro del automóvil, con elementos que hoy en día son muy comunes, pero que por aquel entonces resultaban ser todo un avance inalcanzable.
Treinta años después, Peugeot quiere celebrar un evento en el que rinda homenaje a todo el legado de concept cars que ha ido desarrollando desde el nacimiento del impactante Quasar. Dicho evento comenzó el 1 de julio y pretende estar operativo hasta el 31 del mismo mes, en el Museo de la aventura de Peugeot, en Sochaux, Francia. En él Peugeot muestra algunos de sus concept cars más significativos, como el propio Quasar, el Proxima, el Oxia, y algunos más recientes como el Onyx.
Pero el mayor protagonista es el precursor de estos concept cars, el Quasar, como ya decimos, que en su presentación hace tres décadas, presumía de un motor de cuatro cilindros biturbo de 1,6 litros, que asistido por un intercooler aire-aire, conseguía ofrecer una potencia total de 600 CV. Potencia que podía controlarse desde un ergonómico interior teñido en color rojo, en el que resaltaba una panel de instrumentos digital y un navegador que conseguían sorprender al público que se acercaba a observar más de cerca a este concept en la edición del Salón del Automóvil de París de aquel año.
Todo envuelto de una carrocería exótica de aspecto futurista, en la que destacaba principalmente una cúpula que cumplía el papel de parabrisas y de techo al mismo tiempo. Este mimo concept inspiraría a los ingenieros de la marca para crear los Proxima y Oxia, pasando por un legado de concept cars que llega hasta la actualidad.
Puede parecer que no, pero a estos concept cars, debemos de agradecerles hoy día la presencia de modelos tan emblemáticos y carismáticos como el Peugeot CRZ, o el alto nivel de tecnología del que pueden presumir muchos modelos actuales, y no sólo de la firma francesa.