La esperada lucha entre el rey de los circuitos, y el de las carreteras ha tenido lugar. Muchos de vosotros, entre los que me incluyo, estaba deseando ver una lucha de tú a tú entre el Bugatti Veyron y un Fórmula 1. Y gracias a la antes llamada Lotus Renault, ya la tenemos ante nosotros.
El ganador es en cierto modo obvio, pero también nos dará más resultados. Se llevaron a la misma pista de pruebas a más modelos como el Nissan GT-R, no el de BenSopra que nos enseñó el sábado mi compañero Juan, otros como el Porsche Panamera Turbo S, o el espectacular Mercedes SLS AMG.
Estuvo presente otro modelo francés de competición de la mano de Pescarolo Team, que se llevó su Pescarolo-Judd de LMP1. Sólo éste pudo acercarse un poco al F1 de Lotus-Renault, que era conducido por Nicolas Prost, hijo del mítico Alain Prost.
Y volvemos a uno de los puntos más importantes en la automoción, la relación potencia-peso. El Veyron tiene 1.001 CV de potencia, pero sirven de poco si tiene que arrastrar 2 toneladas de metal. Sin embargo, el coche de LMP1 pesa 900 kilogramos, y apenas rondando los 700 CV de potencia ya supera al Veyron. Sin mencionar que el F1 pesa 600 kilogramos, y que con una potencia parecida al modelo de resistencia de LMP1, consigue un tiempo increíble.
Aún con unas condiciones climatológicas adversas, ya que la pista estaba mojada, el Fórmula 1 de Lotus-Renault alcanza los 300 km/h en 12,1 segundos. Simplemente increíble. Miedo me da el tiempo que hubiera realizado con la pista seca. ¿Alguien dice bajar de 10 segundos en el 0-300?
httpv://youtu.be/M2KMqvxQnDA